Futbol Europeo - La Liga y Ligue 1

La Liga

Con el campeonato español definido y las plazas de competiciones europeas prácticamente ya con pocos cupos disponibles, resulta un tanto complejo encontrar algo interesante en las últimas 4 fechas restantes de La Liga. 

En la jornada 35 uno de los partidos más atractivos fue el que enfrentó al Real Betis ante Barcelona con victoria agónica del conjunto "culé" por 2 goles a 1 para mantenerse cómodo en la segunda posición general. 

Barcelona pese a la victoria es un equipo que se ha vuelto predecible en su accionar y parece mera terquedad que Xavi quiera seguir apostando a jugar con un atacante reconvertido en falso 9 de arranque cuando tanto Memphis como Torres son mejores jugando pegados a una banda y aportando más en desequilibrio. No se entiende que si este "barça" necesita de un referente de área al no tener plenamente definido un juego de dinamismo puro y movilidad entre líneas constante, que no use a de Jong o a Braithwaite si quiere darle descanso a Aubameyang. 

En rendimiento general este Barcelona sigue siendo tan inestable como dependiente de lo que su rival en cuestión le proponga. Betis en ese sentido trató de realizar un partido dinámico y frontal con Canales, Juanmi y Fekir como principales armas en ataque -teniendo a Iglesias- como referente de área, pero descuido mucho las coberturas defensivas con Rodríguez y Guardado a los que Gavi y de Jong superaron en dinámica y velocidad. 

Ambos equipos tienen fallas notables y hasta parecidas en sector defensivo para retroceder en bloque y de manera escalonada. Sus laterales aportan mucho en ofensiva pero son frágiles en coberturas individuales y en lecturas de juego, así como en balones parados como bloques bajos en general.

El partido tardó en romperse hasta la parte complementaria dejando a un Betis mucho más conservador en sus cambios, mientras que Barcelona sigue apelando a un mayor peso ofensivo que se suma al romance que sigue disfrazando muchas falencias en su juego colectivo, con los goles de Fati.

Atlético de Madrid se enfrentó al Real Madrid en un desdibujado "derby madrileño" a sabiendas de que el club "merengue" le daría descanso a ciertos jugadores como Benzema, Modric, Vinicius, Valverde, Carvajal y  Courtois. 

Con todo y el resultado en contra, deberíamos estar hablando hoy de lo bien que se vio el Real Madrid con un equipo "parchado" ante un Atlético de Madrid que ni con la urgencia u obligación de sumar en esta jornada, fue capaz de controlar el partido o dominarlo.

Hoy en este Atlético de Madrid cuya esencia no cambia pese a que lo busquen con modificaciones tácticas o jugadores más técnicos, es un equipo que se nutre de jugadores explosivos como Carrasco que nuevamente ha sido la figura del equipo principalmente porque parte más como volante ofensivo o extremo por izquierda y no se desgasta tanto como carrilero en donde ha jugado gran parte de la temporada. 

Atlético de Madrid sufrió para tener y retener el balón en su posesión pero hizo del juego una constante lucha entre una área y la otra obligando al Real Madrid a jugar un partido abierto sin que pudieran siquiera considerar un partido más pausado pese a tener a Kroos o Casemiro en el campo.

Al "atleti" le hizo falta un gol más para poder justificar este juego tan frontal y explosivo ya que de haber jugado con un esquema más cercano a su 11 ideal, Real Madrid hubiese logrado aprovechar de mejor manera el partido tan desequilibrado que propuso su rival de ciudad.

Sevilla y Villarreal repartieron puntos luego de empatar a 1 gol que significó mucha recompensa para un Sevilla luego de ser exhibidos durante buena parte del juego ante un "submarino amarillo" que le ganó el juego en intensidad, proyección ofensiva, variantes y en dinámica. 

Sevilla rescató el juego gracias a un gol de Koundé en tiempo de reposición pero preocupa mucho lo frágil y hasta inocente que se vio el cuadro de Lopetegui que fue superado con y sin el balón.

Villarreal parece ser que tendrá un cierra de temporada muy bueno y un tanto parecido a lo que vive Mónaco actualmente en Ligue 1. De haber mostrado este nivel de intensidad en su juego colectivo desde meses atrás tal vez la lucha en la parte alta de La Liga hubiese estado más entretenida, porque hoy conceptualmente solo Real Madrid podría decirse que sabe a qué quiere jugar su técnico y después lo estaría este Villarreal que juega un futbol muy alegre y frontal cuando se lo propone.

Aunque sigue teniendo como principal pendiente saber definir mejor sus principales opciones de gol.

El partido entre Athletic Bilbao y Valencia prometía mucho desde lo táctico e  individual que podían proponer ambos equipos y terminó decepcionando a propios y extraños con un empate sin goles que deja a ambas instituciones estancadas en su lucha por futbol europeo para la próxima temporada.

Valencia se ha convertido en un equipo plagado de jugadores intermitentes. No hay mejor manera de definir a futbolistas como Gómez, Guedes, Soler, Gil, Costa, Musah, o a todo su cuadro bajo. Bordalás no ha sabido encontrar el mejor potencial de su plantilla y hoy Valencia es un equipo más que siempre busca construir a partir de lo que le propongan sus rivales sin tener una vocación protagónica en los partidos.

Athletic Bilbao es una mezcla de experiencia u juventud que no ha terminado por cuajar en lo que va de temporada pero parece ser otro equipo que ha encontrado su mejor rendimiento en esta parte final y que sigue promoviendo un futbol ofensivo aceptable en el que los hermanos Williams cargan con mucha de la responsabilidad ofensiva y vertical. Todo esto sin menospreciar a los buenos prospectos que hoy tienen en el propio Nico Williams, Vencedor y  Zarraga.

Ligue 1

Más allá de que la jornada 36 en Francia aún no ha terminado por los partidos postergados entre nice y Saint-Etienne y Rennes ante Nantes por la final de la Copa que se jugó este pasado fin de semana entre Nice y Nantes, es válido hacer un análisis general de lo que dejó esta última fecha en Ligue 1 donde PSG sigue jugando a exhibirse como un equipo pésimamente estructurado y entrenado, en contraste con un Mónaco cuyo ritmo competitivo actual es notable y envidiable, seguido por un Racing de Estrasburgo que fiel a su estilo se mantiene en la pelea por puestos europeos para la próxima temporada. 

Mónaco superó a un Lille que tuvo una campaña como campeón francés digna del olvido en la que Gourvennec nunca fue capaz de encontrar un balance ideal entre su juego directo y dinámico, con mayor equilibrio y control de los partidos en mediocampo y defensa. Este Lille pese a todo ha sido de los pocos equipos en Francia que han mantenido una misma esencia en lo que va de temporada. Son un equipo agradable de ver, que desafortunadamente no ha sabido tener la misma efectividad en ataque que el año anterior, sumado a que Weah y David han tenido un año de completa irregularidad cuando se esperaba mayor madurez en ambos para potenciar sus condiciones técnicas y físicas durante esta temporada. 

En estricto sentido de este partido Lille jugó fiel a su estilo ofensivo con mucha verticalidad por bandas o proyectando a los norteamericanos en balones a los espacios sin lograr traducir su ambición ofensiva en goles. Mónaco si algo nos ha enseñado durante toda la temporada es que es un equipo que no se preocupa mucho si enfrente tiene a un rival que proponga los partidos basándose en la tenencia del balón y el protagonismo. El conjunto del "principado" se sabe capaz de hacer el daño suficiente con un futbol plenamente reactivo. 

Lo irónico de este Mónaco es que luego de una temporada buena pero hasta cierto punto nada espectacular, Tchouaméni ha encontrado en los reflectores mediáticos una linda oportunidad de sobresalir en este equipo, siendo en esta jornada el goleador con 2 muy buenos goles de media y larga distancia, con los que Mónaco puede soñar con un negocio redondo si decide venderlo este verano. 

Lille encontró su único gol de la mano de un Gomes al que le ha costado mucho adaptarse al futbol francés pero que sigue siendo una apuesta a futuro. Aunque para sus condiciones naturales como enganche o mediapunta encarador, este futbol agresivo y vertical no parece ser el entorno ideal para el inglés. 

Racing de Estrasburgo superó por la mínima diferencia a Stade Brestois en un partido realmente entretenido donde ambos equipos salieron a buscar el partido y obligaron a los respectivos porteros a emplearse a fondo en todo momento. 

Racing de Estrasburgo en ambas mitades comenzó dubitativo y tuvo la suerte de que los postes o Sels no permitieron goles en contra. Stade Brestois pese a tener buenos arranques tanto en el primer tiempo como en el complemento, se fue desdibujando con el paso de los minutos y su postura agresiva fue en todo momento bien concebida por su rival que muchas veces jugó a perfilar a Gameiro entre líneas para muchas veces dejarlo mano a mano ante Bizot o con simplemente una sola referencia de marca en velocidad. 

En ambos casos se puede apreciar una limitada capacidad en los recambios aunque en ese sentido se le debe reconocer a Stephan que haya dejado como sustitutos a jugadores como Ajorque, Sissoko y Doukouré que le dieron mucha más estabilidad a su mediocampo para la parte final del encuentro. 

Marsella tuvo en Lorient al rival ideal para desquitarse de su eliminación en Conference League y aunque su temporada parece estar prácticamente finalizada como segundo general en Ligue 1, estos últimos partidos tendrán que servir para probar funcionamientos tácticos e individuales en los casos puntuales de Bakambu, Dieng, Luiz Henrique,  Gerson y hasta Under ya que no puede permitirse este equipo el mismo nivel de ineficacia en ataque que tuvieron ante Feyenoord en la semifinal internacional. Sobretodo si quieren en verdad pasar a ser un equipo que pelea por algo a nivel local principalmente. 

PSG vio nuevamente como un equipo le remontó lo que parecía una victoria administrativa sin grandes complicaciones y otra vez podríamos hablar de lo mal entrenado que está este equipo para funcionar principalmente como colectivo, pero la verdad es que la propia historia moderna de este equipo dicta que es un equipo armado con mucho jugador mediático que se preocupa primero por cómo queda parado en un plano individual, antes que preocuparse por el grupo en general. 

PSG es un equipo entretenido de ver de mediocampo en adelante pero un desastre total en sector defensivo con una zaga que se ve muy desprotegida cuando pierde balones en salida o cuando sus propios atacantes no culminan las jugadas ni apoyan en los retrocesos defensivos. Basta con que los equipos rivales apuesten a transiciones ofensivas o balones parados para incomodar a todo el sector defensivo "parisino" que también tiene a centrales que no han madurado en estos últimos años como uno supondría que lo harían ya.