Futbol Europeo - Serie A

Con 27 jornadas disputadas en Serie A nuevamente se dio un cambio en el liderato con un Napoli que alcanzó en puntos -57- al AC Milán para ocupar la primera posición por mejor capacidad goleadora, aunque con el riesgo latente de que Inter de Milán los supere cuando juegue su partido pendiente al estar actualmente solo 2 puntos por debajo de ellos. 

La irregularidad sigue reinando en el futbol italiano en la parte alta donde se define el campeonato y los pases a competiciones europeas. Napoli y Juventus son los únicos que han sabido aprovechar mejor tales situaciones para consolidar sus proyectos y apostar aún a una temporada positiva. 

En un partido más trabado que espectacular Juventus superó 3 a 2 al Empoli con la oportuna ayuda de un Vlahovic repleto de confianza, sabedor de sus capacidades y un conjunto "bianconeri" que se apoya más que nada en individualidades antes que en el dominio de un estilo. 

Empoli fue un sinodal difícil de superar aunque la ausencia de Henderson en medio campo nuevamente se hizo presente en la circulación de este equipo que hoy es ante todo aguerrido. Juventus es un buen equipo cuando logra traducir sus posesiones en jugadas intensas. No le sirve mucho a este equipo tener el balón con movimientos tan pasivos y se entiende mucho que ante la falta de Dybala sea Cuadrado el jugador que aporte más recorridos con el balón de medio campo al frente.

 Juventus defensivamente es un equipo muy pasivo para designar marcas personales o escalonamientos en bloque. A Empoli le faltó más explosividad por fuera al tratar de jugar de manera más centralizada con Bajrami atrás de Pinamonti y Di Francesco, pero en cada acción que obligaron a Juventus a retroceder con balones aéreos se vieron las carencias de un equipo que con todo y Bonucci no da la sensación de tener a un líder que imponga carácter. 

Dentro de las múltiples inconsistencias que ha tenido este equipo en medio campo Rabiot ha cumplido como un jugador que ante todo en esta "juve" siempre cumple con su labor en salida y eventuales aportaciones ofensivas como interior o volante mixto. Lo cierto es que ha este equipo plagado de mediocampistas le está faltando mayor explosividad por bandas o en el mismo ataque que complementen a una figura -Vlahovic- que llegó con toda la confianza del mundo para este semestre. 

Napoli también aprovechó los resultados negativos que tuvieron los equipos de Milán y a pesar de no haber tenido una gran jornada ante Lazio, aprovechó en la segunda mitad errores puntuales de la zaga "lazial" para encaminar su partido y llevarse los 3 puntos tras una victoria de 2 a 1. 

Lazio fue un equipo de momentos que no logró traducir sus breves lapsos de intensidad y mejores conexiones ofensivas en goles. Su problema fue que las lagunas de bajo rendimiento y fallas defensivas tampoco las pudo sobrellevar y Napoli supo decantar el partido de manera precisa. 

Napoli sufre mucho para controlar los juegos desde un medio campo ordenado. En casi todos sus juegos parecen estar dispuestos a jugar bajo una dinámica de ida y vuelta constante, teniendo confianza plena en su aparato ofensivo y su calidad sobrada en Insigne, Osimhen y Politano. Lazio trató de llevar el juego a esa dinámica agresiva e intensa con transiciones rápidas por fuera de Anderson y Zaccagni  sin que estas tuvieran efecto con Immobile bien custodiado en el área por Koulibaly y Rrahmani. 

Este partido a pesar de sus altos niveles de intensidad no estuvo tan bien jugado desde un aspecto técnico por ambos equipos. En Napoli sigue habiendo una sensación de dependencia por Insigne y Osimhen mientras que jugadores como Zielinski, Elmas, Politano y Peña pareciera que cumplen con el desgaste físico y sacrificios tácticos. De la Lazio no sorprende tanto que sea más un equipo de momentos y tampoco que no tenga la suficiente pegada que ha tenido en años anteriores, aunque por talento y variantes sigue pareciendo más desperdiciado el plantel de la Lazio que el de los "napolitanos".

Una irreconocible Fiorentina cayó con toda justicia ante Sassuolo por marcador de 2 a 1 y a pesar de que estuvo a unos cuantos minutos de lograr el empate, Sassuolo hizo el mayor esfuerzo, priorizó siempre el juego más espectacular y parece haber encontrado una armonía entre su futbol ofensivo directo y una zaga que sabe jugar en bloque de mejor manera. 

Sassuolo es un proyecto que vale la pena analizar y disfrutar por cómo trata de jugar sus partidos de medio campo en adelante. Es un equipo dotado de argumentos colectivos para ofender que sigue estando dispuesto a tener cada jornada partidos de ida y vuelta confiados en sus capacidades ofensivas. 

Berardi es indiscutiblemente su jugador más importante por el peso que tiene en la construcción de la mayor parte de las jugadas. En esta temporada Scamacca y Raspadori han surgido como grandes proyectos del futbol italiano en ofensiva, pero Traoré no puede quedarse atrás en el análisis de este equipo con las virtudes que te ofrece partiendo como volante abierto o extremo por izquierda, cuando en esencia es un más bien un media punta. 

No se entiende que Fiorentina haya jugado de arranque sin González en la banda derecha o Callejón por izquierda. Sottil e Ikoné tuvieron un peso nulo en los ataques del equipo al igual que Maleh, Castrovilli y Amrabat en medio campo por encima de Torreira y Duncan. La "viola" lució perdida en casi todo el juego y su gol a 2 minutos del final hubiese significado una injusticia increíble para un Sassuolo que hizo prácticamente todo bien.

Al AC Milán le siguen pasando factura las malas decisiones en jugadas puntuales al atacar para definir sus encuentros aunque en esta ocasión tuvo enfrente a un Udinese que supo anular sus principales cualidades explosivas para tomar las riendas del juego ante unos "rossoneri" que cada vez más parece ser que juegan con exceso de nervios por las esperanzas que se le han depositado al equipo en esta temporada de Serie A.

Udinese por increíble que parezca    fue mucho mejor equipo que los "diablos" porque con poco tiempo de posesión activa hizo más juego en ataque que su rival, principalmente por banda derecha con Molina y Arslan. 

Dentro de las fallas corregibles que tuvo AC Milán en su estructura grupal se podría destacar actualmente la carencia de recambios para Leão y Messias que pierden demasiada proyección y verticalidad para las partes complementarias y hoy no hay jugadores que tengan el suficiente peso que los brasileños salvo el caso de un inconsistente Saelemaekers o un Castillejo que   parece estar borrado para Pioli. 

Udinese supo llevar el juego al área rival y bastó con una genialidad de Pereyra para rescatar un balón que parecía perdido para que el desorden imperara en la portería "rossoneri" y Udogie simplemente empujara el balón a las redes.  

Su vecino de ciudad y actual monarca de Italia vive lo que ya podría considerarse como crisis al no lograr concretar goles en partidos consecutivos a pesar de generar el suficiente volumen de juego para merecerlo. 

Es preocupante ver a un Inter de Milán que se preocupa siempre por jugar de manera intensa y ofensiva, incapaz de traducir su dominio y claridad para generar jugadas de diversas maneras en goles. Genoa se presumía como un rival asequible para recuperar el liderato y terminó por acrecentar la preocupación en un equipo que funciona muy bien en líneas generales pero que hoy no tiene en jugadores como Dzeko, Sánchez y Martínez a alguien que se haga responsable de definir las jugadas creadas. 

Genoa dentro de sus capacidades supo incomodar en todo momento los remates rivales y aproximaciones cuando éstas se generaban por dentro con Barella y Calhanoglu como interiores ofensivos, pero cuando el juego pasaba por bandas con Perisic y Dumfries fueron más que nada fallas a la hora de definir que buenas coberturas defensivas de un equipo al parecer sentenciado al descenso.  

  

Lo de Inter hoy pasa por una mala racha de sus atacantes que no debería ser tan criticada cuando por funcionamiento siguen siendo de los clubes más intensos y con un trabajo más desarrollado en todo el futbol italiano. Pero para las capacidades de los jugadores ofensivos que tiene, es buen momento para que dejen de perdonar tanta irregularidad que hay en sus demás rivales en la parte alta del certamen. 

Spezia recibió un duro castigo con una derrota en el tiempo de reposición ante Roma y a pesar de haber generado poco juego en ataque, demostró durante todo el juego la suficiente solvencia defensiva para merecer algo más ante una Roma intensa que hoy es un buen ejemplo de que no siempre es suficiente con atacar por atacar sin conceptos plenamente entendidos como equipo. 

Roma ganó el juego porque buscó el resultado y tuvo enfrente a un rival demasiado conservador que nunca se atrevió a incomodar el aparato táctico "romano" que hoy luce exageradamente agresivo para la poca coordinación que tienen como unidad. Toda esta crítica al futbol ofensivo desordenado de la Roma se ejemplifica mejor al ver los números crudos de lo que fue su juego. Más de 30 jugadas en ataque y 10 con dirección a portería te habla de muchas situaciones posibles, pero sobretodo de una mala concepción del futbol ofensivo cuando el partido lo ganaste por un penal en el último minuto de juego.

Esta Roma ataca con más intensidad que estructura y sigue jugando con el destino ante una postura que rivales con mayor atrevimiento seguirán exhibiendo al equipo de Mourinho que tiene más lagunas en su juego que fortalezas. 

Hellas Verona volvió a regalarnos una brillante actuación de Simeone en ataque para derrotar 3 a 1 a Venezia con triplete del argentino. 

Venezia fue mejor en la primera parte con jugadas muy claras que en general nacieron de la táctica fija y de manera espectacular Hellas Verona las logró sacar en la línea. Ese fue el principal problema de Venezia cuando tuvo su mejor desempeño colectivo. Para el complemento Venezia intentó jugar con mayor proyección ofensiva y el desorden que generó entre medio campo y defensa lo supo aprovechar Hellas Verona con transiciones rápidas tras robos en mitad del campo que Simeone tradujo con goles. 

Fue mucho castigo para una Venezia atrevida que cometió el error fundamental de querer jugar con mayor intensidad y vocación ofensiva con un medio campo que nunca logró adaptarse a tales condiciones de juego buscando siempre salidas controladas desde su propia área. 

Cagliari dio otra de las grandes sorpresas de la jornada 27 en Serie A tras derrotar 2 a 1 a Torino cuyo principal problema radica en su irregularidad misma. 

Torino pierde mucho cuando no está Mandragora en medio campo que ha demostrado una mejor conexión con Pobega en esa línea de 4 que completan normalmente Singo y Vojvoda de lo que Lukic ha hecho cuando su entrenador Juric ha optado por él como segundo contención. Cagliari se apoyó mucho en ese esquema táctico que los obliga de medio campo al frente a siempre tratar de ampliar las bandas con Henrique y Bellanova y tuvo enfrente a un rival que no sabe escalonarse o retroceder de manera ordenada y peor cuando tiene que hacer en velocidad. 

A Torino le sigue haciendo falta Praet en la media punta que acompañe a Brekalo atrás de Belotti y aunque Pjaca no tuvo un mal encuentro, no tiene los mismos movimientos entre líneas que sí ha logrado el belga en partidos anteriores. Torino también dejó muestras evidentes de falta de ambición ante un equipo que cede muchos espacios entre medio campo y defensa y aunque nunca trató de instaurar una dinámica abierta, tampoco jugó un partido intenso con el balón para proyectar a Brekalo, Vojvoda y Belotti como sus jugadores más explosivos. 

Cagliari pese al desorden táctico que recurrentemente comete cuando pierde el balón tuvo en su arquero Cragno al mejor jugador del partido sacando jugadas bien desarrolladas desde táctica que pudieron haber cambiado el rumbo del juego desde la primera mitad. Sorprende que este Cagliari funcione de mejor manera sin un delantero centro tan natural ya que Pedro goza de libertades tácticas y capacidades técnicas que por momentos dejan al equipo sin un referente en ataque con Pereiro que también se retrasa más para apoyar en la dinámica ofensiva. 

Salernitana a pesar de haber jugado un partido de los más ambiciosos y agresivos de la temporada, no logró superar a Bologna y su partido terminó con un empate a 1 gol. Salernitana es un caso bastante triste si analizamos detenidamente cada uno de sus juegos. Es un equipo que prioriza mucho el orden defensivo y los sacrificios tácticos sin renunciar directamente al juego ofensivo. Su problema es tan simple como complejo. 

No tiene mayores argumentos que la experiencia de un Ribery que ya no juega al mismo ritmo de hace unos años, mientras que Verdi y Djuric a pesar de ser jugadores con buena técnica individual y movimientos precisos en ataque, no tienen otro tipo de apoyos desde medio campo o en sus laterales para proyectar mejor sus ofensivas. Bologna tenía enfrente a un rival y un escenario ideal para sumar una victoria más pero nunca se le vio el ímpetu y vocación que sí tuvo Salernitana. Con mejores armas como Barrow, Orsolini, Arnautovic, Hickey, De Silvestri y Soriano es frustrante ver a un Bologna tan conformista como lo fue ante Salernitana. 

La jornada 27 concluyó con una victoria aplastante de Atalanta sobre Sampdoria en la cual el equipo de Bergamo retomó ciertos ideales ofensivos que había olvidado en jornadas anteriores como el futbol directo, pocos pases laterales y mucho dinamismo en ofensiva por parte de Pasalic, Pessina, Boga y un Koopmeiners que no deja de madurar en su primer temporada fuera de Países Bajos. 

Es digno de señalar el cambio táctico que ha tenido este Atalanta que parecía completamente acostumbrado a su clásico 3-4-3 para estar hoy conformado con una línea de 4 defensas, 2 volantes en recuperación, 3 creativos y un delantero con libertad plena como Pasalic que es otro jugador cuya evolución personal es notable. Es muy meritorio este cambio positivo en Atalanta porque hemos visto ejemplos como Lazio o Udinese que hasta hace una temporada jugaban con un entendimiento pleno de un estilo de juego y formación táctica, y para este año han sufrido mucho con cambios en esos 2 aspectos puntuales. 

Sampdoria nunca pudo competir desde la intensidad y verticalidad con la que Atalanta proyecta sus ataques. El juego duró y la paridad solo duraron 5 minutos cuando Atalanta comenzó a marcar un dominio claro en el partido y con un equipo muy arrinconado y sus carrileros más enfocados en labores defensivas que en darle salida al equipo, Sampdoria nunca mostró argumentos para incomodar al rival o tratar de reaccionar.