Futbol Europeo - Serie A
El futbol italiano con la jornada 28 en Serie A nos dejó el partido que define buena parte de la madurez que ha adquirido el AC Milán en esta temporada para seguir aspirando con posibilidades muy latentes por el campeonato .
Por obvias razones se debe comenzar con la victoria "rossoneri" por 1 gol ante Napoli que deja por ahora al AC Milán como líder en solitario del campeonato con el entendido que Inter de Milán sigue con un partido menos y una diferencia apenas de 2 puntos en la segunda posición.
AC Milán tuvo un juego muy completo si nos apegamos a los fundamentos básicos del juego. Fue un equipo muy ordenado en sector defensivo, supo generar salidas pulcras desde su área, tuvo buena amplitud por bandas y anuló casi en su totalidad toda estrategia que le propuso su rival en turno.
No fue un partido espectacular y repleto de oportunidades en ataque para uno u otro equipo y gran parte de la "culpa" o responsabilidad se debió a un mejor desempeño como grupo por parte del AC Milán. Napoli nunca fue capaz de imprimir su juego de mayor vocación con el balón y trató de jugar ese futbol directo que hoy parece convenirle más a un equipo "rossoneri" que explota muy bien las cualidades técnicas y físicas de Leão, Messias y Hernández, sumadas a la capacidad en movimientos de Giroud y un mediocampo que cuando tiene a Kessie y a Tonali, es cuando mejor se ha visto el equipo.
Napoli fue más que nada esfuerzos aislados por bandas que nunca fructificaron en acciones de gol para Osimhen. AC Milán la única debilidad que sigue mostrando de manera evidente es al momento de buscar recambios y que éstos tengan el mismo peso en dinámica e intensidad que los titulares. Saelemaekers sigue siendo de lo más atractivo para este equipo con su capacidad de profundizar, hacer coberturas defensivas y conducir el balón.
Si había dudas generalizadas en la capacidad ofensiva del Inter de Milán luego de varios partidos sin anotaciones, Salernitana resultó ser la solución perfecta para el monarca italiano con 5 goles sin reacción alguna de su rival y un funcionamiento muy superior y rayando en la perfección.
Parecía obvio que ante un rival tan modesto Inter sacara provecho para reencontrarse con el gol, pero lo más positivo de esta jornada va muy encaminado a sus 2 delanteros que hicieron todos los goles del encuentro. A Martínez le urgía mucho volver a anotar porque ha sido de todos quién ha fallado jugadas más claras en los partidos pasados. Dzeko siempre se ha visto más como un complemento para la idea de juego, que como el delantero centro que está obligado a resolver los juegos.
Inter de Milán nuevamente volvió a dominar el juego desde un mediocampo superior con la dinámica y circulación necesaria para que Salernitana nunca tuviera opciones de controlar la zona de recuperación y apostar a otro tipo de juego. Sus carrileros siempre se han destacado por ser elementos fundamentales en los ataques para generar espacios por ambas bandas y tanto Darmian como Dumfries hoy parecen inamovibles en este esquema de Inzaghi.
El juego entre Juventus y Spezia pareció haberse jugado únicamente en un sector del campo ya que la primera mitad fue de total control para el conjunto "bianconeri" mientras que para el complemento en esa misma zona del campo Spezia propuso un partido más agresivo que en los primeros 45 minutos.
Juventus es un equipo cuando Cuadrado aporta su juego ofensivo por bandas y otro muy pasivo e impreciso cuando el colombiano no impone su juego de manera individual. Juventus sigue viéndose como un equipo de buena calidad técnica pero poco entendimiento como equipo, que sigue sumando principalmente porque aprovecha muy bien los errores puntuales de sus rivales aunque sigue estando lejos de saber controlar los desenlaces de los mismos. Spezia cedió medio tiempo de un juego en el que pudo haber competido de mejor forma si hubiese tenido la misma vocación agresiva que tuvo en la parte complementaria.
Fiorentina y Hellas Verona se dedicaron en su partido a tratar de anulase mútuamente antes que buscar por convicción propia el resultado y tras 90 minutos de más imprecisiones que buen futbol, un empate a 1 gol terminó dejando un partido que prometía mucho mejor espectáculo del que terminó siendo.
Fiorentina en el mejor de los casos fue el equipo con mejor conducción del juego a pesar de no lograr imponer su juego directo y desequilibrante por bandas con lo intermitentes que han sido sus extremos dentro de toda su plantilla al no lograr consolidar a un equipo titular de manera regular.
Hellas Verona decepciona por su postura reactiva que nunca se vio eficaz en movimientos, lecturas de juego y proyecciones puntuales dejando a Simeone y Lassagna completamente aislados del partido en ataque.
Lazio al fin tuvo un fin de semana tranquilo ante un rival de cierta jerarquía como Cagliari al que supo anular desde una posesión del alón más activa y productiva que en partidos anteriores y aunque sigue cediendo muchos espacios entre mediocampo y defensa cuando pierde el balón, quizás vimos el juego más completo del conjunto "romano" bajo las órdenes de Sarri.
Cagliari apostó a defenderse con muchos hombres sin el compromiso o vocación ideal de jugadores como Bellanova, Henrique, Deiola o Marin cuyo juego en mediocampo nunca se vio fijo entre facetas defensivas u ofensivas.
Lazio tienen una dependencia natural por Immobile que va más allá de los goles que produce el italiano. Es el único delantero con el que los extremos e interiores se saben entender y por rompimientos entre líneas y volumen de juego el delantero italiano es inamovible para este grupo desde hace años. Cagliari logró genera juego desde las salidas por bandas pero nunca fue capaz de generar jugadas claras de gol para Pedro y Pereiro.
Sassuolo ha encontrado su mejor ritmo en lo que va de temporada y no tuvo piedad alguna ante Venezia al que goleó 4 a 1 en un partido al que tal vez le hicieron falta un par de goles para ambos equipos para justificar tantas llegadas ofensivas que generaron en 90 minutos.
La propuesta ofensiva de Sassuolo sigue siendo un arma de doble filo que ante rivales tan modestos como Venezia no le complican tanto los juegos, pero el haber permitido casi el mismo número de jugadas en ataque de las que ellos mismos generaron -16- habla mucho de las facilidades que hubo en mediocampo y defensa por parte de Sassuolo para permitir ocasiones de gol en su propia área.
Raspadori y Berardi siguen luciendo como los grandes arquitectos en este equipo partiendo muchas veces de adentro hacia afuera con mucha prudencia y la explosividad complementaria de Traoré y Scamacca.
Roma derrotó por diferencia mínima a un Atalanta que nuevamente se vio inoperante ante un rival que supo pararse adecuadamente en sector defensivo y ni el mayor tiempo de posesión, conducción y dinámica fue suficiente para imponerse a una Roma que fue práctica, explosiva y mucho más agresiva con sus transiciones rápidas y la táctica fija para quedarse con los 3 puntos.
Sin mucha espectacularidad Roma parece haber entendido la mejor manera de encarar este tipo de partidos ante rivales de jerarquía con mayor prudencia en sus parados tácticos, mucho forcejeo en la zona de recuperación y verticalidad por bandas para construir mucho con poco. Atalanta careció de presencia ofensiva con un Miranchuk aislado en el ataque y Pasalic, Koopmeiners y Pessina más enfocados en la recuperación que en la construcción ofensiva del equipo.
Lo más sorprendente del juego fue que Roma no se vio como ese equipo agresivo e imprudente que ha sido durante gran parte de la temporada ante equipos de igual o mayor jerarquía que ellos. En un plano individual Abraham se ha consolidado como el delantero de gran capacidad técnica y atlética que increíblemente siempre se dudó en Inglaterra.
La jornada 28 tuvo 2 juegos más entre Genoa y Empoli con empate sin goles y Torino ante Bologna que en ambos casos terminaron con pocas sensaciones positivas para los equipos involucrados.
Genoa es un claro ejemplo de un equipo que por más buenas intenciones que tenga, no logra comulgar entre una idea de juego más ambiciosa y agresiva para tratar de salvar su categoría, con resultados directos y goles en primera instancia. Empoli fue muy permisivo en este juego y nunca logró identificar el mejor estilo para tratar de sacar provecho ante un rival que no tiene suerte o calidad de cara a portería.
Torino y Bologna fue otro juego discreto en el que el "toro" nunca fue capaz de potenciar su mejor entendimiento de grupo, mientras que Bologna se vio más como un equipo conservador que priorizó ante todo el sumar algo en la jornada sin tener nunca volumen de juego o vocación ofensiva.
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