La esencia del Madrid
Dos importantes salidas en 2018 y el Real Madrid aún no encuentra el camino que lo lleve a la estabilidad y el progreso que tanto necesita un club, que vio en el año pasado una temporada catastrófica, sin grandes logros y un vacío en muchos sectores de la institución, que hoy intentan llenar para volver a dominar en lo deportivo.
Ganar tres Champions League seguidas fue un hecho sin precedentes. Marcó un antes y un después en la competición favorita del Real Madrid. Supuso el inicio de una hegemonía que prometía años de dominio en España y Europa. Lamentablemente las salidas de Cristiano Ronaldo y Zinedine Zidane respectivamente, marcaron un rumbo negativo para el club que hasta la fecha sigue sin encontrar.
Para nadie es sorpresa que más allá de los títulos consecutivos en Europa y ciertas estadísticas individuales, ese Real Madrid no ofreció algo que el aficionado pueda recordar más que los títulos mismos. Tampoco habría que recriminarles la ausencia de tal legado. Al final de cuentas el Madrid siempre ha estado para ganar, sin importar las formas.
El problema radica en que se ocuparon mucho en el resultado final, sin preocuparse realmente en lo que vendría a futuro.
Hoy es muy fácil decir que Zidane fue un visionario que no veía otra forma de seguir ganando en este club. Pero quien se atreverá a cuestionarlo al ser de los principales culpables de que la plantilla no se haya desarrollado, perfeccionado y/o mejorado cuando los éxitos llegaban.
Tuvo que irse un año y regresar como un salvador cuando el proyecto que él mismo que dejó, no tenía sustento para seguir al nivel en el cual se mantenía al menos en el plano internacional.
Tampoco sirve hoy decir que esos tres títulos estuviesen acompañados de varias series o partidos en particular con polémica siempre a favor del cuadro merengue. A nadie la servirá hoy más que para generar polémica barata. Son los problemas de fondo y cómo los está trabajando hoy el Madrid, los que habría que analizar.
Florentino Pérez por años ha sido el amo del equipo. Nadie cuestiona eso. Durante su gestión se ha vuelto famosa la idea del conjunto galáctico. El poder adquisitivo por encima de cualquier otra cosa ha sido la manera en la cual se ha manejado este club desde hace años. Así es el Real Madrid y quizás sea el único club que funcione de esa manera.
De poco o nada sirven los proyectos cuando al "jefe" le interesa algo. Actualmente se encuentran con una "mano atada" por el proyecto de remodelación del Santiago Bernabéu, pero no ha impedido que al menos un galáctico llegue al equipo. Para esta campaña el indicado fue Hazard.
Para esta segunda edición bajo las ordenes de Zidane, nuevamente hay una intención de realizar un proyecto a mediano y largo plazo. Sino nadie entendería las incorporaciones de personajes jóvenes como Rodrygo, Mendy, Militao, Jovic y la retención de otros como Valverde o Vinícius.
Se antoja difícil que todos los anteriormente mencionados terminen por brillar con el cuadro blanco, que en su constante necesidad por demostrar que es el equipo más grande del mundo, siempre tiene que ganar todo. Por ello a nadie la sorprende que en este club la idea de un proyecto a mediano o largo plazo muchas veces no fructifique. Si no rindes de manera inmediata para el Real Madrid eres una parte del negocio. Así como puedes llegar y rendir en el campo, puedes irte y dejar un buen negocio para el las arcas del club.
Mismo caso aplica hoy para Zinedine Zidane. Se fue como un héroe tras los títulos consecutivos en Europa. Poco o nada se le cuestionaba cuando ganaba títulos, pero nunca enamoro con su forma de jugar o con alguna idea futbolística. Atrevido también sería menospreciarlo, pero siendo realistas "Zizou" no es un estratega que domine todo lo que puede ofrecer un entrenador a un club. Aunque le duela a su afición, es un excelente gestor de grupo, pero como táctico, o potenciador de talento, no es más que el resto de los que hoy dirigen a su nivel.
Sin duda alguna la apuesta del Madrid hoy es interesante. Desafortunadamente en los pocos partidos que lleva esta temporada se sigue viendo al club que prefiere usar a sus figuras consagradas con todo y que algunas no estén en su mejor nivel, por encima de algunas nuevas piezas que podrían funcionar de mejor manera.
Aunado a esto la ausencia de una autentica leyenda como lo es Cristiano Ronaldo, y con todo lo que significó para el Madrid durante su estancia es un elemento que no puede despreciarse. Hoy solo un jugador puede hacer y significar lo que era Ronaldo para el Madrid y desafortunadamente juega para su acérrimo rival. Difícilmente Eden Hazard cumplirá con al menos la mitad de lo que generaba CR7 cuando vestía de blanco.
En otros sectores como la defensa, urge una renovación o que las figuras comiencen a jugar con esa jerarquía que presumen. El tiempo se agota de Kroos y de James como merengues al igual que el de Modric que estuvo un año agotado por el mundial. Benzema de a poco muestra ser el único líder en ofensiva pero nunca se ha caracterizado por ser el goleador letal con estadísticas arrolladoras como las necesita hoy el Madrid. Bale caso aparte y prácticamente olvidado.
Y así se puede seguir con cada caso de jugadores que hoy tienen más nombre que futbol. La temporada aún es joven, pero con este nivel se ve complicado que el Real Madrid protagonice con su futbol. Y con la inclusión del VAR, quizás sus rivales hoy en Europa estén más tranquilos.
Mientras tanto el club blanco espera que esta idea de proyecto perdure. Pocos ejemplos hay de algo parecido en el Real Madrid, pero hoy cualquiera le puede competir con dinero. Ellos mismos son culpables de que el mercado de fichajes se maneje como se hace hoy. Pero tal parece que hoy apuestan a intentar armar un proyecto a futuro, aunque en su esencia solo esté el ganar, sin importar si hay o no un legado de por medio que perdure.
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