Guard1nes 2021 - Jornada 7

Una jornada más se ha ido del Guard1anes 2021 sin grandes sobresaltos netamente deportivos que uno pueda recordar, reconocer o apreciar. Semana a semana se ve que el futbol mexicano está sumido en una crisis de identidad como producto comercial, como entidad deportiva y como negocio que verdaderamente brinde espectáculo. 

Cada jornada deja al menos un tema extra cancha que casi siempre termina predominando los espacios de análisis y debate que hoy simplemente se resumen a quién da el mejor show de entretenimiento, ante un producto que en la cancha no es capaz de darlo.

Para esta semana Atlético San Luis y Santos fueron los encargados de comenzar las actividades de la séptima jornada en un duelo tan pobre como la liga misma en su capacidad de enfrentar los problemas. 

El partido por sí mismo no ofreció grandes virtudes que se puedan analizar más allá de hechos concretos, como que San Luis es un equipo práctico, que no juega un futbol brillante, pero que cuando logra combinar sus limitadas asociaciones con cierta dinámica puede ser un equipo efectivo y peligroso. Santos en su mezquinidad habitual sigue siendo un equipo impredecible tanto por la intensidad que puede mostrar de un juego a otro, como por el futbol mismo que sea capaz de desarrollar inclusive de una mitad a la otra en un solo partido. 

Este juego se perdió incluso para su análisis posterior tras el altercado que llevó  a presuntos actos racistas hacia un jugador lagunero, que en este espacio y sin las evidencias necesarias, no tiene mayor cabida, como el partido en sí. San Luis ganó con lo justo y parece retomar cierta confianza grupal necesaria, mientras que Santos en su irregularidad habitual simplemente cosecha el futbol que ha sembrado semana a semana. 

Los siguientes juegos realzados el viernes pasado no cambiaron mucho la tónica con la que comenzó esta jornada.

Necaxa y Rayados empataron a 1 gol en un partido que nuevamente da muestra clara de la mediocridad que impera en el club regiomontano para liquidar partidos que en teoría no tienen ningún grado de complejidad. Rayados tenía control absoluto del juego y en la segunda parte nunca supo hacerle frente a un cuadro rojiblanco aguerrido y ni por ideas individuales o grupales, el equipo del "Vasco" supo cómo superar o inquietar al equipo peor trabajado de la liga.

Necaxa regaló 45 minutos y aunque tuvo unos dignos 15 minutos  en la segunda parte, sigue siendo un equipo que simplemente está mal trabajado. El discurso que algunos expertos dan sobre éste equipo y su falta de talento es tan ambiguo como erróneo. Necaxa podría jugar con éste mismo plante a algo mejor, si tan solo el equipo comprendiera conceptos básicos de una idea de juego clara. Sacó un empate que solo le da más vida a un proyecto muerto que encabeza una directiva incapaz y un entrenador obsoleto. 

En el otro juego de viernes Bravos de Juárez derrotó por la mínima diferencia a Mazatlán en otro juego a ritmo semi-lento, con ideas ofensivas y de calidad  escasas y con dos caras muy diferentes para ambos clubes. Bravos da muestra de ser otro más sumido en la inconsistencia y mediocridad, que no es capaz de evolucionar y mostrar un avance progresivo en su futbol. Puede jugar bien una jornada y ser humillado a la otra y nada cambia realmente con este equipo.   

Mazatlán por otro lado es un equipo que se ve bastante frustrado. Da la impresión que quieren mejorar y hacen lo posible por lograrlo, pero simplemente lo resultados siguen siendo negativos. Es un equipo que no genera futbol ofensivo claro y en defensa cometen demasiados errores por partido que facilitan mucho a cualquier rival la producción ofensiva.

El sábado en un juego por demás extraño, Cruz Azul sigue aspirando a ser por el momento el equipo más lucido y mejor trabajado de la liga. Derrotaron a Toluca con un marcador bastante cerrado, pero el equipo celeste sigue siendo por mucho el que mejor desarrolla sus conceptos futbolísticos.

Con todo y que el resultado muestre un marcador de 3 goles a 2, Cruz Azul siempre marcó el ritmo y la intensidad. Juan Reynoso ha sabido darle continuidad a ese futbol intenso, vertical y eficaz que desarrolló Siboldi con este equipo el semestre anterior. Tranquilamente podría decirse que Cruz Azul en cuanto a conceptos, estilo y demás variantes no ha cambiado pese al cambio de cuerpo técnico. 

Esta jornada pese a que por un momento vieron el resultado dificultarse, siempre se vio a un equipo sobrio, que sabía de sus capacidades y nunca se percibió nerviosismo alguno para perder el juego. 

Toluca aunque en semanas anteriores había mostrado ciertas mejorías graduales en las facetas básicas del juego, demostró en este partido que ante los rivales de verdadera calidad siguen estando muy lejos de poder competir al menso de forma directa. Siguen siendo un club que ataca relativamente bien, pero que no da garantía alguna en defensa. Ya sea por errores individuales o de conceptos -posicionamiento, recorridos, duelos individuales-, en defensa siguen siendo un equipo muy mal trabajado y así difícilmente pelearán por algo serio.

Más tarde el mismo sábado Atlas y América dejaron otro juego raro al menos para el análisis posterior. Atlas sigue siendo un equipo que aunque intente jugar bien, o al menos intente desarrollar su plan de juego, siempre deja detalles que ellos mismos provocan que los hacen perder sus partidos. Para este duelo una expulsión imprudente y un penal cuestionable terminaron por afectarles, pero siguen siendo un equipo que comete muchos errores propios y aunque por futbol sean uno de los pocos equipos que siempre intenta jugar a algo, esas falencias en su propio accionar siempre les cuestan caro en casi todas las jornadas.

América parece seguir casado con los resultados a costa de funcionamientos mediocres y más cercanos malos que aceptables. Es un equipo que como lo hemos dicho anteriormente, se ha acostumbrado a sumar puntos. El problema para este equipo ha sido la fase final, en donde se les exige mejor futbol como equipo. 

En su esencia siguen siendo un club reactivo, que aprovecha mucho los errores rivales y que le da mucha importancia a los balones parados, pero no más. No es un club que logre imponer su ritmo, que abrume a los rivales o que tenga una solidez defensiva ejemplar. Es un club y una plantilla a la que se le ha acomodado este sistema de competencia y en esta fase simplemente saben sumar unidades y sobrellevar el certamen.

Pese a esto, hoy por un error administrativo de nada les sirvió ganar en la cancha, ya que Atlas se llevó "en la mesa" los 3 puntos producto de una alineación indebida del cuadro azulcrema.

El domingo en uno de los mejores juegos de la jornada Pumas y León se enfrentaron en un partido muy dinámico, abierto y bastante grato para el aficionado estándar del futbol mexicano.

Pumas nuevamente volvió a mostrar ideas claras en su juego. Futbol directo, intenso, aprovechando cada espacio que cedió su rival y las salidas a velocidad al robar el esférico. Con muchas variantes en ofensiva el problema  para el cuadro felino fue ese último pase para definir sus jugadas o incluso la calidad en sus definiciones. Fue un partido ciertamente muy injusto para el equipo universitario ya que siempre se vio como el equipo más cómodo en el campo y con mayor solidez y dinámica en su creación de futbol.

León salió a jugar este partido a lo que Pumas lo dejó. Nunca lograron imponer su ritmo y adoptaron un estilo de a ida u vuelta que los universitarios propusieron. Con todo y eso, la "fiera" mostró un lado muy vertical que para nada decepcionó. Son un equipo con un plantel tan bien trabajado, que pueden adoptar más de una idea de juego y no se ven nunca incómodos. La única problemática sigue siendo su defensa, ya que están permitiendo muchas llegadas por juego cuando el semestre pasado eran uno de los clubes más sobrios y hegemónicos en faceta defensiva.

La victoria de León por la mínima diferencia deja como conclusión a un campeón que aún está a tiempo de revivir este semestre y a un subcampeón que encontró su mejor versión nuevamente en casa, pero que le faltan detalles para volver a ser tan efectivo y solvente como lo fue el semestre anterior.

En el duelo que sostuvieron Querétaro y Puebla se puede rescatar el ímpetu que mostró Puebla al final del juego en un partido que parecía perdido sin mayores sobresaltos. Querétaro deja ir una victoria muy sufrida por un error infantil en la marca defensiva y poco más se le puede agregar a un juego en el que ambos equipos pelearon, se nulificaron entre ellos y que terminó siendo una buena demostración de equipos congruentes con sus capacidades y que están para pelearle a cualquier en cualquier circunstancia.

Ya en la noche dominical Tigres enfrentó a Tijuana en un duelo muy vertical en el que los felinos explotaron a placer todas las deficiencias defensivas que tienen los xolos, que no pudieron ante un rival mejor estructurado línea por línea. 

Xolos es un equipo explosivo en ofensiva, que logra coordinarse a gran velocidad para generar peligro en ataque. Pero en defensa son un equipo completamente distinto, muy descoordinado para defender tras pérdida y que cede muchos espacios en marca personal. 

Tigres siempre tuvo claro que con imprimir cierta presión ordenada en medio campo y aprovechar las transiciones rápidas podía dañar a un equipo que se desordena fácilmente cuando pierde el balón.

El resultado dejó un marcador apretado de 3 goles a 2, pero Tigres siempre fue más en el partido y aunque no logró administrar el resultado tras imponer su voluntad anotando los 3 goles primero, nunca se vio en riesgo real de perder el juego.

Xolos si en verdad quiere demostrar que ha mejorado y que puede ser un aspirante a liguilla, debe mejorar mucho en sus transiciones defensivas y en su ritmo de juego. De nada sirve jugar de forma tan explosiva si tu defensa permite jugadas rivales al por mayor en cada partido.

Para final de esta jornada Pachuca recibió a Chivas en un duelo bastante entretenido para lo que venían realizando ambos equipos. Un partido en el cual ambos decidieron atacar las debilidades defensivas de cada uno y aunque como resultado haya sido un empate a 1 gol, en el trámite del mismo se pudo apreciar un juego abierto, con muchos espacios y errores defensivos, pero con muy buenas intervenciones de sus porteros y fallas evidentes en la definición de ambos ataques.

Chivas sigue en su misma inercia tratando de reencontrar ese estilo que los llevó a semifinales el certamen pasado, pero continúan mostrándose  como un equipo muy predecible y que pierde muy fácil su propia dinámica de juego. 

Pachuca nuevamente mostró con sus fallas notables en defensa y pese a que logran generar un futbol basto en ofensiva, parecen estar peleados con el gol sin importar el modo en que lo busquen. Rescatan un empate que no le sirve a ningún equipo.

Jornada 7 que a rasgos generales deja a  Cruz Azul como uno de los pocos equipos que verdaderamente juega a algo y además entretiene en cada uno de sus juegos. Tigres por debajo se presenta como ese otro equipo hegemónico que puede mejorar aún más pero siempre sabe ganar en esta fase. 

Por cuestiones administrativas América perdió sus puntos esta jornada pero sigue bajo su usual realidad de equipo gris, que sabe ganar. Toluca y Xolos se mantienen arriba, pero dejan una sensación similar  de fragilidad ante los verdaderos aspirantes en el futbol mexicano. Algunos otros al menos quieren mejorar -Querétaro, Puebla, Santos y tal vez San Luis- y luego viene el resto, que simplemente mantiene su inconsistencia o mediocridad de siempre, con algunos accidentados casos y excepciones.