Las aspiraciones reales en un mundial

Cada cuatro años hay un compilado de emociones que renuevan a todo pambolero. Ya sea el nacionalismo mal entendido que algunos países promueven mediante un solo deporte, el amor por una selección en especial o en general por el futbol mismo, un mundial nunca pasa desapercibido para quienes disfrutan de este -algunas veces arcaico y muy explotado- espectáculo.

En los últimos años el mundial de futbol ha mostrado cierta tendencia un tanto predecible pero que increíblemente no aburre. Pese a que aún hay algunos que lo siguen considerando como el punto máximo del balompié global -otros consideran que es la Champions League-, hoy basta decir que ya casi no hay sorpresas en este evento tan esperado por millones de fanáticos.

Pero a pesar de que en este torneo ya casi no haya historias significativas, la mayoría de las personas -incluyendo a futbolistas y directivos de las selecciones- siguen sin comprender su verdadero papel en estas competiciones. Y es que aunque suene cruel para con los deportistas profesionales que sueñan con jugar un mundial, deberían quedar claras las aspiraciones de los diversos equipos, siguiendo un patrón simple: su desarrollo deportivo e historial futbolístico.

Como primer tendencia tenemos a las potencias. Equipos que en cada evento organizado por la FIFA son aspirantes al título y que en la mayoría de las ocasiones presentan equipos y estilos definidos y atractivos para con el público. Para Rusia tenemos claros los casos de Alemania, Brasil y España. Escuelas de futbol que aunque tengan hoy algunas incógnitas, sus títulos, estilos y jugadores les dan para ser considerados desde hoy como las principales selecciones para este verano.

Debajo viene los aspirantes reales. Países cuyos equipos presentan proyectos interesantes, tienen historia que los representa en el futbol como conjuntos importantes, pero que carecen de alguna característica importante como lo pueden ser: futbol de conjunto, líderes en el campo, estilo definido, estratega capaz o individualidades verdaderamente importantes. En 2018, los catapultados como aspirantes en menor o mayor medida son Francia y Argentina. Con todo y sus grandes individualidades, aún carecen de credibilidad en momentos importantes. Sus figuras han fallado en momentos trascendentales y tampoco han demostrado tener líderes verdaderos tanto dentro como desde el banquillo. Hoy son meros aspirantes aunque de los más serios en la categoría.

A continuación siguen equipos que deberían ser considerados como participantes serios. Equipos con buenos planteles en general, ideas sólidas, pero que en muchas ocasiones dependen de un destello especial para brillar en torneos así y no por un futbol que los respalde por completo. Selecciones que bien pueden dar un susto pero que están entre ser consideradas aspirantes reales o equipos mediocres con buenos nombres. Bélgica lidera esta sección, con una generación que solo ha demostrado que su constante es el decepcionar a todos con un equipo brillante en lo individual, pero que le falta esa estirpe que solo haciendo algo histórico se obtiene. 

Colombia y Uruguay también entran en esta categoría. escuadras con talento individual, un estilo histórico que entretiene en ambos casos, pero que dependen de imponderables como la "garra charrúa" o méritos individuales. En el límite entre esta categoría y una menor se encuentra Inglaterra. Los ingleses antes eran un enigma, pero con analizar sus participaciones resientes en torneos relevantes queda claro que en la isla dejan atrás todo tipo de progreso deportivo y cuando llegan los momentos importantes, siempre recaen en su estilo netamente obsoleto y mal practicado.  Hoy tienen una gran generación, muy técnica, con individualidades interesantes, pero como conjunto siempre se las arreglan para desprestigiar su historia en este deporte. 

Siguiendo este análisis nos encontramos con una categoría especial. Selecciones que presentan a jugadores en general desconocidos, pero que como conjunto se desenvuelven muy bien, son prácticos en algunos casos y en muchas ocasiones su futbol resulta entretenido y versátil con cualquier rival. Equipos que pasan desapercibidos, pero que cuando sorprenden en torneos se les cataloga como "caballos negros". Perú lidera esta sección con un equipo sólido, con figuras específicas que catapultan al equipo a un nivel mayor y que tienen en Ricardo Gareca a un estratega que los hace jugar de manera espectacular y sin tapujos por su rival en turno.

El otro caballo negro debe ser sin duda alguna la sensación en Europa. Un equipo desconocido, con jugadores sin renombre o peso en el futbol internacional, pero que con un futbol práctico, simple y con mucha intensidad y profesionalismo dificultan a cualquier rival. Islandia es ese caballo negro del cual se espera mucho. No decepcionaron en su debut en la Eurocopa y para Rusia esa mentalidad será vital. 

Así es como llegamos con los participantes. Equipos que aunque presenten a figuras de talla mundial, solamente van a competir tres partidos y en algunos casos sus ambiciones reales son la ilusión de un quinto partido, el ser catalogados como "la sorpresa o el caballo negro", pero que curiosamente siempre son los que manejan el discurso de "vamos con la mentalidad de ser campeones".

Aquí destacan equipos como Portugal con todo y Cristiano. Los locales -Rusia- con un futbol ambiguo y parecido al de los ingleses. México con todo y su futbol mediocre. Costa Rica con la esperanza de un mundial como el pasado. Polonia con su generación desgastada. Suiza, Dinamarca y Croacia con equipos que al parecer nunca explotarán su potencial. Y también Japón y Nigeria como las constantes esperanzas y  decepciones asiáticas y africanas, respectivamente.  

Por último pero no menos importante están los equipos que rellenan la fase de grupos. Selecciones que ya con el hecho de haberse clasificado han conseguido méritos suficientes para hacer felices a sus aficionados, pero que sin grandes planteles ni historial que los respalde, solamente van a disfrutar el evento y tratar de aprender para desarrollar mejor su futbol en competiciones de este nivel. Son los casos de Egipto, Marruecos, Irán, Senegal y  Panamá por mencionar algunos. 

De esta manera está conformada una copa del mundo actualmente. La lucha entre América y Europa está latente, pero en condiciones como las que se presentarán seguramente en Rusia, los occidentales llevan la ventaja. se vislumbra difícil que vaya a ser tan espectacular como lo fue Brasil hace cuatro años, pero un mundial nunca decepciona. 

Rusia promete mucho futbol de calidad, pero será mejor que como aficionados sepamos desde ahorita distinguir de entre los equipos serios y los que solo prometen fuera de la cancha.