De niño malo a leyenda.

Estimados lectores, hoy les presentamos una edición especial en Marcador Global, con motivo de un partido que si bien no ha sido tan llamativo ni tan promocionado, es para homenajear a uno de los mejores futbolistas de la última década.

Futbolista inglés nacido en Croxteth, Liverpool, desde los nueve años está ligado a este deporte cuando su camino profesional comenzó para el Everton. Con tan solo 17 años ya entrenaba en el primer equipo  del conjunto toffee y varios ya lo comenzaban a ver como el futuro del futbol inglés.

En 2004 y con 77 partidos disputados y 7 goles marcados, Wayne Rooney (para los que aún no sabían de quien hablábamos) pasó a formar parte del Manchester United siendo para ese entonces el jugador más caro de menos de 20 años con cualidades notorias, como manejo de balón, disparo potente y gran velocidad.

Hoy con 244 goles en 511 partidos con el Manchester United, a 6 anotaciones de convertirse en el máximo goleador del club y siendo hoy por hoy  el máximo rompe redes con la selección inglesa con 53 goles en 115 apariciones, podemos hablar de un futbolista de época y con características difíciles de encontrar hoy en día.

Futbolista polivalente, capaz de jugar tanto de delantero clavado, segunda punta, extremo o incluso mediocampista con muy buena visión y técnica para hilar ataques ofensivos, además hablamos de un jugador de enromes recorridos durante un partido, que así como ataca el área rival, es capaz de defender su propia portería (algo que ya no se ve en los futbolistas ofensivos), no olvidando su gran talento para hacer grandes mancuernas con futbolistas de talla mundial como Cristiano Ronaldo, Ruud van Nistelrooy, Robin Van Persie y Carlos Tévez por mencionar algunos.

Si bien es cierto que para muchos "goles son amores" en ese renglón el niño malo de Inglaterra en los últimos años se ha quedado corto, hay que evaluar y valorar sus últimas apariciones basándonos en las posiciones que ha ocupado, dejando en claro que el hoy capitán del United y de Inglaterra ha modificado su forma de juego, para hacer funcionar más al equipo, que tener el protagonismo de sus goles como antes.

Explosivo como pocos delanteros, Wayne nunca ha dejado de demostrar su talento nato para este deporte, habiendo dejado en su carrera momentos que resaltan como su debut con el United haciendo un hat-trick ante Fenerbache, su golazo ante New Castle United en 2005, sus múltiples goles de tiro libre y su recordado gol ante Manchester City en la temporada 2010-2011.

Hablar de un futbolista con la capacidad de Wayne Rooney es sencillamente hablar de una leyenda. Un jugador capaz de crear una jugada de gol él sólo, recorriendo distancias considerable y quitándose jugadores, pocos delanteros hoy en día lo pueden hacer, sobretodo dejando los números que él ha cosechado en su exitosa trayectoria. 

Críticos evidentemente siempre habrá, pero quien se haya quedado esperando algo más de Rooney sencillamente es un ignorante más que dice saber de futbol. En un deporte donde muchos dicen saber grandes cosas a causa de los números y estadísticas, solo resume su pobre capacidad de observar el talento puro de futbolistas, y en el caso de nuestro protagonista muchos han cometido ese gran pecado.

Bautizado por algunos fanáticos ingleses como "el Pelé blanco" tal vez por su capacidad goleadora o algunas otras cualidades, algunos lo tomarán como broma o lo verán en el caso de que en su momento Wayne fue llamado a ser la gran figura de Inglaterra, pero si uno compara las características deportivas que llegó a mostrar Edson Arantes do Nascimento y las compara con las que Wayne Rooney posee, es inevitable encontrar rasgos parecidos en su manera de jugar (obviamente respetando la carrera de ambos y los que los dos lograron y sin sobrepasar el mundo de las comparaciones), haciendo no tan descabellado ese reconocimiento que algunos fanáticos le dan al británico. 

A menos de un día de que se juegue el partido en honor a Wayne Rooney entre el Manchester United y el Everton, solo se puede recalcar que estamos siendo testigos de uno de los mejores futbolistas de la última década, basados no solo en números, goles y títulos, sino en funcionamiento, inteligencia, calidad y talento.

Wayne Rooney, el chico malo de Inglaterra, apodo ganado por su garra y su fuerza al momento de jugar, que lo ha llevado a estar entre los mejores de su país y del mundo. Futbolista comprometido con su profesión, que para fortuna de quienes apreciamos algo más un simple partido de futbol, es otro ejemplo de que esto es algo más que un mero deporte.